Sgabei – masa frita italiana

Presentación

Los sgabei son un entremés italiano, 🇮🇹 típico de la ciudad de La Spezia, que se originó en la Lunigiana (una zona de confín entre Liguria y Toscana). Con esta receta, explicada en detalle, prepararás estas deliciosas tiras de masa de pan fritas que, según relata la historia, las mujeres locales inventaron al tratar de aprovechar la masa para pan que les sobraba al final del día.

Los sgabei se utilizan hoy como una alternativa mucho más golosa al pan y se pueden comer solos o acompañados de un surtido de quesos (blandos, tiernos o curados) y diversos embutidos.

Su textura, ligeramente crujiente y gomosa en el exterior y suave y aireada en el interior, te va a encantar y convertirá este plato en tu entremés más solicitado. 😉


Información

  • Dificultad: normal
  • Tiempo preparación: 2h
  • Coste: bajo
  • Dosis: para 4 personas

Ingredientes

  • Harina de trigo: 300 g*
  • Harina de fuerza: 200 g*
  • Agua: 350 ml
  • Levadura fresca en cubito: ½ cubito = 12 g** (tipo: Saccaromices Cerevisiae)
  • Sal: 1 cucharadita
  • Aceite de oliva/de girasol: 1 cucharada + para freír

*Al utilizar levadura de panadería, los mejores resultados se obtienen empleando exclusiva o al menos parcialmente harina de fuerza: por ello puedes utilizar incluso 500 g de fuerza y prescindir de la harina normal. Sin embargo, la receta sale muy bien incluso si utilizas solo harina de trigo de todo uso (por si no tienes la otra en casa 😉 ).

**Puedes sustituir la levadura fresca en cubito por levadura de panadería seca, en las cantidades indicadas por su fabricante en la confección.


Realización

Calienta el agua hasta que esté tibia.
[Ojo: no tiene que quemarte la piel: si tuviera esa temperatura demasiado elevada impediría la acción de la levadura].

En una pequeña parte de agua disuelve la levadura troceada (que puedes utilizar seca, fresca o directamente sacada del congelador).

En un bol vierte las harinas, la sal, la cucharada de aceite, el agua tibia que te ha quedado y el líquido con la levadura disuelta. Amasa manualmente o con tu robot de cocina durante al menos 5 minutos, para lograr una masa lisa y elástica.

Coloca la masa en un bol y cubre con un trapo limpio o película transparente y deja reposar durante 1h – 1,5h en un lugar caliente.

Pasado ese tiempo, amasa nuevamente sobre tu encimera para lograr una masa lisa y luego divídela en unas 6 partes. Coge una y cubre las demás.

Esparce harina sobre la encimera y sobre la superficie de la masa. Aplasta esta última con tus dedos para dar forma de rectángulo a tu masa. Utilizando una máquina para hacer pasta fresca (de las que convierten progresivamente la masa en una lámina fina) o un rodillo, saca unas láminas de masa de unos 3 mm de espesor. Esparce varias veces la harina sobre los dos lados de la masa para evitar que se pegue, especialmente cada vez que reduzcas el espesor de laminación.
[Ojo: si utilizas la máquina, empieza por el espesor más grande que se pueda programar entre los rodillos. Pasa la masa una primera vez, dobla la masa aplastada que sale de las primeras laminaciones sobre sí misma – acortando así su largueza de la mitad o de dos tercios – (este paso sirve porque la superficie suele salir irregular por la presión inicialmente ejercida), esparce con harina y vuelve a pasar por la máquina. Cuando notes que sale una lámina lisa, entonces esparce otra vez con harina y reduce el espacio entre los rodillos: pasa la masa por la máquina al menos dos veces, hasta sacar una lámina lisa, antes de reducir nuevamente el espacio. Sigue estos pasos hasta conseguir el espesor deseado.]

Ahora que tienes una lámina, utiliza un cortador para pizza o un cuchillo para sacar unas tiras de masa: puedes hacer cuadrados, rectángulos o rombos. Coloca cada pieza cobre una bandeja de madera bien enharinada para prevenir que la masa se pegue. Cubre las bandejas preparadas con un trapo limpio para que no se sequen.

Repite el proceso hasta agotar los trozos de masa (no olvides que puedes utilizar las sobras de los cortes de la porción anterior en la siguiente, juntándolas a la masa y amasando un poco antes de laminar).

Los primeros sgabei que hayas preparado habrán crecido un poco: puedes empezar a freírlos respetando el orden de preparación o dejar que leuden unos 10 minutos más antes de hacerlo: cuanto más crezcan, más aireados y suaves estarán.

Fríe los sgabei (siempre respetando el orden de preparación, para que todos puedan crecer un poco) en una sartén con abundante aceite caliente hasta que estén bien dorados por las dos partes. Cuando estén listos, colócalos sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite.

Sirve calientes.

Sgabei - masa frita italiana
Sgabei – masa frita italiana

¡Listos!

¡BUEN PROVECHO!


Sugerencias

Existe una variación que prevé sustituir ¼ parte de la harina total de la receta por harina fina de maíz (ojo: no es maizena/almidón de maíz): la textura cambia y el resultado es también muy interesante 😉

Acompaña los sgabei con un surtido de verduras cortadas en palillos que puedas mojar en vinagreta: es una guarnición, bastante frecuente en Italia para este tipo de platos, que se llama pinzimonio.

Rollitos primavera – con receta para la masa

Presentación

Cocinillas amantes de la comida china, ¡esta receta es para vosotr@s! 🐉🥡🥢

Si pensabais que para saborear los deliciosos rollitos primavera no teníais más remedio que ir al restaurante o al supermercado, ¡estáis a punto de vivir una epifanía, una revolución culinaria!

No estoy exagerando: podéis recrear los rollitos desde cero, ¡masa incluida!, en vuestras cocinas y con ingredientes que seguramente tenéis en la nevera y en la despensa. El resultado no tiene absolutamente nada que envidiar a los rollitos de los restaurantes y es mucho más rico y saludable que el de los supermercados.

El relleno podéis adaptarlo a vuestros gustos (yo por ejemplo no tenía brotes de soja y decidí añadir puerro) y podéis decidir si utilizar carne o preparar una versión vegetariana.

La masa, por otra parte, es la bomba de esta receta: se prepara con ingredientes básicos y, empleando a la técnica con pincel de silicona de Anna, lograréis una masa del espesor correcto para que quede súper crujiente después de freírla.

Esta receta es también perfecta para «ocultar» verduras a los peques en un plato que les va a encantar y que es muy saludable.

¿A qué esperas? Esta receta va a convertirse seguramente en tu nuevo ritual de comfort food semanal 😉


Información

  • Dificultad: normal
  • Tiempo preparación: 1 h
  • Coste: normal
  • Dosis: para 4 personas (24 rollitos)

Ingredientes

PARA EL RELLENO:

  • Repollo: ½ si es mediano o ⅓ si es grande
  • Zanahorias: 2 medianas
  • Cebolla: 1 pequeña
  • Puerro: trozo de unos 15 cm
  • Ajo: ½ diente
  • Carne picada: 200 g (mixta/ de cerdo/ de vacuno – o sin carne para vegetarianos)
  • Cubitos para el caldo: 1-2 (depende de cuanta sal llevan)
  • Pimienta: al gusto
  • Jengibre molido: al gusto (o fresco, si lo prefieres)
  • Mejorana: al gusto
  • Salsa picante Louisiana/Guindilla molida: al gusto (opcional)
  • Aceite de girasol: 3-4 cucharadas
  • Salsa de soja: para servir al lado (opcional – sustituible por sazonador líquido Maggi)

PARA LA MASA:

  • Harina de trigo: 1 vaso (= 125 g)
  • Agua: 1 vaso (= 250 ml)
  • Aceite de girasol: 1 cucharadita + para freír
  • Sal: ⅓ cucharadita
  • Colorante para paella: 1 pizca (opcional)

Realización

Empieza preparando las verduras para el relleno. Corta el repollo en juliana; pica finamente la cebolla; tritura un ajo con una prensa para ajos (o pica finamente con un cuchillo); pela las zanahorias y rállalas por la malla gruesa de un rallador, lava bien el puerro, córtalo por la mitad en el sentido de la largueza y córtalo en juliana.

Ahora calienta una sartén grande, añade un chorrito de aceite y vierte la cebolla y el ajo. Cuando empiezan a ponerse dorados, añade el repollo y sazona con un poco de cubito para caldo desmenuzado, pimienta, jengibre molido y mejorana. Añade medio vaso de agua y tapa. Cuando se hayan ablandado un poco, pero siguen crujientes, quita la tapa y sube el fogón al máximo para que el agua evapore completamente y el repollo se dore ligeramente. Vierte el contenido de la sartén en un bol grande, porque hay que cocinar más verduras.

En la misma sartén, que no hace falta limpiar, vierte otro chorrito de aceite y las zanahorias y el puerro. Sazona con las mismas especias que antes y, si te gusta, añade unas gotas de salsa picante o una pizca de guindilla molida: no hace falta que pique mucho, pero queda bien porque redondea el sabor. Cuando las verduras se hayan ablandado un poco, sin perder su punto crujiente, y no quede líquido de cocción, vacía el contenido de la sartén en el bol con el repollo.
(Ojo: es importante que todos los ingredientes del relleno estén suficientemente secos porque no queremos líquido en el interior de los rollitos.)

El último ingrediente del relleno es la carne picada: viértela en la misma sartén a la que habrás añadido otro poco de aceite. Pon el fogón a máxima temperatura para que la carne se quede crujiente y cobre un bonito color. Sazona nuevamente con las mismas especias: cubito de caldo, pimienta, mejorana, jengibre molido y, si quieres, salsa picante.
(Nota: puedes prescindir del picante en las verduras y quizás acentuar su intensidad en la carne 😉 ).
Cuando esté lista, junta la carne con las verduras y mezcla todo bien.

Mientras el relleno se enfría, vamos a preparar la masa para los rollitos.

En un bol mediano vierte la harina, la sal y, si quieres, una pizca de colorante para paella.
(Nota: el colorante es opcional, pero me parece que hace que el resultado final gane en parecido a los rollitos de los restaurantes 😉 )
Añade el vaso de agua y el aceite y mezcla bien con un batidor de varillas hasta lograr un compuesto homogéneo.

Pon una sartén antiadherente mediana (yo utilicé una de unos 21 cm de diámetro) sobre el fogón programado a un nivel de calor medio-alto. Cuando la sartén se caliente, apártala del fuego y utiliza un pincel de silicona bañado en la masa para pintar unas líneas perpendiculares y otras circulares que vayan a formar la tortilla. Verás como la masa se va secando mientras das pinceladas, lo que te permite añadir capas en diferentes direcciones.

Tortilla casera para rollitos primavera
Tortilla casera para rollitos primavera

El resultado no tiene que ser una tortilla espesa, sino que simplemente buscamos crear una superficie suficientemente robusta y sin agujeros para que no se nos rompa a la hora de crear los rollitos. Tendrías que sacar 24 tortillas.

Lo siguiente es enrollar nuestros rollitos. Sigue las instrucciones de la imagen que hay a continuación para lograr unos rollitos que no se abrirán mientras los frías.

Ahora solo nos queda por freír los rollitos en una sartén con aceite bien caliente: coloca el rollito como en la imagen 5 (es decir con la parte «abierta» boca abajo) y, cuando se haya dorado por ese lado, da la vuelta y deja que se dore por el otro también. Coloca los rollitos cocinados sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Sírvelos calientes con un mini cuenco con salsa de soja al lado y ¡listos!

Rollitos primavera
Rollitos primavera

¡BUEN PROVECHO!


Sugerencias

Prueba esta receta con brotes de soja para una versión más típica. Degústala también con salsa agridulce.

Los rollitos son sabrosos incluso al día siguiente, pero para disfrutar de su punto crujiente es aconsejable consumirlos recién fritos.

Vegetarianos y veganos podéis preparar la receta sin carne, aumentando de 200 g la cantidad de las verduras 😉

Espirales fritas aromatizadas a los cítricos

Presentación

¡Carnaval está aquí! 🎭 🎉 💃 ¿Sabes qué significa? ¡Tenemos un pretexto más para preparar un postre! 😂

Para celebrar a lo grande el Carnaval debes probar esta receta italiana, de la región de Marche. Son unas espirales de masa brioche hecha con levadura de cerveza que desprenden todo el aroma de las naranjas y del limón que lleva su sencillo relleno.

La masa casi no lleva azúcar, pero el relleno le aporta el toque de dulzura perfecto 😉 y lo mejor es que en menos de una hora tendrás el postre listo para saborearlo o para servirlo, porque solo tiene que reposar 30 minutos.


Información

  • Dificultad: baja
  • Tiempo preparación: 1h
  • Coste: bajo
  • Dosis: para 4 personas

Ingredientes

PARA LA MASA:

  • Huevos: 2 medianos
  • Aceite de girasol: 40 g + para freír
  • Leche (de vaca o vegetal): 200 g
  • Harina de trigo: 500 g
  • Levadura de cerveza: 25 g si es fresca o 7 g si es seca
  • Azúcar: 2 cucharaditas
  • Aroma: 2 ml (vainilla, naranja, limón o ron) (opcional)

PARA EL RELLENO:

  • Azúcar: 150-200 g (depende de lo dulce que te guste – el azúcar puede ser vainillado)
  • Cáscara de 1 limón
  • Cáscara de 2 naranjas

Realización

En un bol pequeño, disuelve la levadura (desmenuzada o en polvo) con algunas cucharadas de leche tibia y añade las cucharaditas de azúcar. Mezcla para que la levadura se disuelva bien.

En un bol grande rompe los huevos y bátelos un poco. Vierte lo que queda de la leche tibia, el aceite de girasol, la levadura disuelta, el aroma y mezcla. Tamiza en ese mismo bol la harina y mezcla hasta que te salga una masa sólida.

Ahora amasa sobre tu encimera durante varios minutos, para que la masa se quede homogénea y sobre todo elástica. Deja que repose en un bol durante media hora en sitio caliente o tibio, con un trapo encima para que no se seque.

En la espera, prepara el relleno: en un bol ralla la cáscara de 1 limón y 2 naranjas, añade el azúcar y remueve.

Cuando la masa haya crecido, divídela en dos partes y extiéndela con un rodillo, formando un rectángulo de unos 3 mm de espesor.

Esparce el relleno sobre el rectángulo, dejando el borde de uno de los lados largos sin cubrir. Sobre ese borde vamos a esparcir un poco de agua con un pincel de cocina: de esta forma se nos pegará mejor la masa.

Ahora enrolla empezando a empujar el lado largo cubierto de azúcar hacia el otro largo que está bañado con agua: aprieta ligeramente cuando acabes, para que se selle bien.

Desliza el rollo hasta que te quede la parte del cierre se quede abajo, a contacto con la encimera, y corta lonchas de 1 cm de espesor. Coloca las espirales sobre una bandeja de horno cubierta con papel de horno, dejando un poco de distancia entre una y otra para que no se peguen.

Repite con la otra mitad de la masa.

Calienta el aceite de girasol en una sartén (la temperatura perfecta es de 170ºC). Fríe pocas espirales a la vez, removiendo con frecuencia, hasta que se queden doradas.

Retira las espirales fritas y ponlas sobre papel vegetal para eliminar el exceso de aceite.
[Ojo: no utilices papel absorbente porque el azúcar caliente puede pegarse 😉 ]

Utilizando un colador metálico, retira el exceso de azúcar que las espirales pueden soltar en el aceite.

Emplata y ¡listas!

¡BUEN PROVECHO!


Sugerencias

Conserva las espirales bajo una campana de cristal, en un contenedor cerrado de lata o en una bolsita para que no se seque durante unos 2-3 días.

Si quieres que vuelvan a tener la misma consistencia que después de freírlas, puedes ponerla en el microondas unos segundos.

Si quieres celebrar el Carnaval a lo alto, hazlo con otra receta típica de estas fiestas: aquí tienes una italiana, los Intrigoni (orejas de Carnaval), una polaca, las berlinas (pączki) y a una que va a dejar a todos sorprendidos, las rosas con confituras 😉

Buñuelos de patatas con queso Idiazábal ahumado y pimientos confitados

Presentación

Este plato tuve la ocasión de aprenderlo directamente del chef que lo ideó, Juan Pozuelo, en una masterclass suya, pocos días antes de que la preparase personalmente en un episodio de su programa televisivo Sabor de Hogar.

Con mucha ilusión y cercanía me transmitió los conocimientos y los trucos para lograr este delicioso entremés, que es absolutamente ideal para las quedadas con amigos, para ver un partido y picar algo o para un buffet gustoso y cautivador.

Os aconsejo estos fáciles buñuelos vegetarianos en los que las patatas aportan una textura aterciopelada y el toque ahumado del queso Idiazábal y la frescura del cebollino completan de forma espectacular el plato. A continuación os sugiero también dos opciones distintas para acompañar los pimientos 😉

¡A cocinar!


Información

  • Dificultad: normal
  • Tiempo preparación: 30 min
  • Coste: normal
  • Dosis: para 4 personas

Ingredientes

  • Queso Idiazábal ahumado: 250 g
  • Patatas: 250 g
  • Harina de trigo: 250 g
  • Pimientos del piquillo: 250 g
  • Ajos: 4
  • Cebollino fresco: al gusto
  • Sal: al gusto
  • Aceite de oliva virgen extra: para freír
  • Aceite de girasol: para freír

Realización

Pela las patatas y córtalas en trozos. Ponlas a cocinar en agua salada hasta que estén blandas.

En la espera, limpia unos ajos y pícalos finamente. Deja que se doren en una sartén con un poco de aceite de oliva. Corta en tiras los pimientos y añádelos a la sartén. Añade unas cucharadas de agua y deja unos minutos a fuego suave. Añade una cucharada de azúcar y deja algunos minutos más.

Escurre las patatas cocidas y, cuando estén ya frías, machácalas con un machacador de patatas o un prensador.

Ralla el queso Idiazábal por la malla fina del rallador y pica el cebollino. Junta estos dos ingredientes a las patatas y mezcla.

Forma unas bolitas con la masa.

Buñuelos de queso Idiazábal y patatas

En un bol mezcla agua y harina hasta obtener una masa homogénea de la consistencia de la nata líquida y, a continuación, reboza las bolitas en ella.

Nada más rebozarlas ponlas a freír en abundante aceite caliente hasta que estén doradas y ponlas a escurrir sobre papel absorbente.

Sirve las bolitas tibias con los pimientos a parte.

¡BUEN PROVECHO!


Sugerencias

Puedes optar por crear una salsa en lugar de servir los pimientos en tiras: verte los pimientos cocinados en una batidora y deja que se conviertan en una salsa lisa y homogénea. Sirve en un plato a parte, para que los comensales puedan bañar los buñuelos en la salsa.



Mozzarella in carrozza

Presentación

La mozzarella in carrozza es una receta italiana originaria de Nápoles, pero difusa también en la región de Roma.

Se trata de una verdadera glotonería: suave pan de molde, cubierto por una crujiente y dorada capa y con un suave e hilante corazón de mozzarella derretida… ¡no hay quien pueda resistirse!

Con este entremés o plato único podrás conquistar incluso al paladar más exigente, pero sin tardar demasiado en prepararlo y sin complicaciones… que es un rasgo maravilloso de la receta jaja 😉


Información

  • Dificultad: baja
  • Tiempo preparación: 30 min
  • Coste: normal
  • Dosis: para 4 personas

Ingredientes

  • Pan blanco de molde: 600 g (= 12 rebanadas)
  • Mozzarella de bufala:  500 g
  • Huevos: 5 grandes
  • Harina de trigo: 100 g
  • Pan rallado: 300 g
  • Sal: al gusto
  • Aceite de girasol: para freír

Realización

Empieza cortando la mozzarella en lonchas de 1 cm de espesor. Colócalas sobre una hoja de papel absorbente, cubre con otra hoja y aprieta delicadamente con tus manos para quitar el exceso de líquido. Si es necesario, repite hasta que las lonchas estén suficientemente secas.

Cubre una rebanada de pan con las lonchas de mozzarella (sin que sobresalgan), sazona con sal y coloca otra rebanada por encima. Presiona ligeramente con tus manos para compactarlo todo. Repite hasta terminar los ingredientes.

Rompe los huevos en un bol y vierte harina en un plato y pan rallado en otro.

Reboza los bocadillos pasándolos en harina, luego en huevo (dejando escurrir el exceso antes del siguiente paso) y finalmente en pan rallado.
(Nota: si no quieres ensuciarte mucho las manos, ayúdate con dos tenedores 😉 )

mozzarella in carrozza

En una sartén vierte aceite y deja que llegue a temperatura. Empieza a freír pequeñas cantidades a la vez (para que la temperatura no baje de golpe) hasta que estén bien doradas, dando la vuelta.

Retira y coloca sobre papel absorbente antes de emplatar.

¡Listas!

¡BUEN PROVECHO!


Sugerencias

Puedes realizar un doble rebozado para que quede más crujiente: reboza la primera vez y luego deja los bocadillos en la nevera durante unos 15 minutos antes de volver a pasarlos en huevo y pan rallado.

Corn dog y ensalada con feta y tomates secos

Presentación

¿Te apetece un poco de street food americano en su versión casera?

Atrévete a cocinar estos corn dogs: se preparan de forma verdaderamente muy sencilla y el resultado es un plato original para servir las salchichas de una forma distinta y cautivadora… cubiertas con una deliciosa y dorada capa de masa frita.

Prepara este entremés para ti, los peques o para una quedada con tus amigos 😉


Información

  • Dificultad: baja
  • Tiempo preparación: 30 min
  • Coste: normal
  • Dosis: 8 raciones

Ingredientes

MASA PARA CORN DOG

  • Harina de trigo: 240 g
  • Harina de maíz: 120 g
  • Azúcar: 1 cucharadita
  • Sal: 1 cucharadita
  • Levadura química en polvo: 3 cucharaditas
  • Huevo: 1 mediano (*)
  • Leche: 120 ml (*)
  • Agua caliente: lo suficiente (*)

OTROS INGREDIENTES PARA CORN DOG

  • Salchichas (frankfurt): 1 confección
  • Aceite de girasol (para freír): 1 l

ENSALADA

  • Ensalada Iceberg: ½ unidad
  • Zanahoria: 1
  • Pepino: 1
  • Ajo: 1 diente
  • Tomates secos: 3 unidades
  • Aceite de tomates secos: 1 cucharada
  • Albahaca fresca: 1 manojo
  • Queso feta: 100 g
  • Sal: al gusto
  • Pimienta: al gusto

Realización

Empezamos preparando la masa para los corn dog: mezcla en un bol los ingredientes secos (los primeros 5 en la lista de los ingredientes) y añadimos los ingredientes mojados (los marcados con el *). Mezcla hasta que la masa quede lisa, añadiendo un poco de agua caliente hasta lograr la consistencia de una nata espesa.

En una olla pon a calentar el aceite de girasol: sabrás que ha llegado a temperatura si echando sobre el mismo una pizca de harina notas que empieza a sofreír alegremente, pero sin volverse marrón demasiado rápido (en este caso sería demasiado caliente y es aconsejable cambiar el aceite).

Mezcla la masa y, si quieres que te resulte más fácil el siguiente paso, viérte sufieciente masa para rellenar casi un vaso muy alto (deja un centímetro del borde).

Ahora coge una brocheta de madera y clávala en una salchicha en el sentido de la largueza (como si fuese un polo), por lo menos hasta la mitad.

Agarrando el palillo, sumerge la salchicha en el vaso con la masa para crear una capa que cubra toda la carne. Extrae y sumerge en el aceite caliente. Deja que se cocine hasta que esté uniformemente dorado.

Ahora prepara la ensalada: en un bol, desmenuza la ensalada en trozos más pequeños. Elimina la piel de las zanahorias y de los pepinos y crea láminas de estas verduras utilizando el pela-patatas, que hay que incorporar a la ensalada. Añade también el diente de ajo laminado, los tomates secos picados y las hojas de albahaca desmenuzadas con las manos. Sazona con sal, pimienta y el aceite de los tomates secos. Por último, incorpora el queso feta picado en cubos. corn dog.jpg

Sirve los corn dog, recién fritos, con la ensalada de tomates secos y feta al lado.

¡Listos!

¡BUEN PROVECHO!


Sugerencias

Personaliza el sabor de los corn dogs con las salsas más emblemáticas del street food neoyorquino: ketchup y mostaza 😉

Atrévete también a experimentar otras combinaciones como el alioli, la salsa de yogur y hierbas, la salsa BBQ o la salsa brava 😉

 

Queso Primosale frito

Presentación

¿Alguien ha dicho queso frito? ¡Para la quedada de esta tarde con tus amigos sería un plato perfecto! Especialmente, si buscas una alternativa a la mozzarella frita. Resultado de imagen de primosale

El Primosale es un queso siciliano de consistencia suave que encierra todo el sabor de la leche, siendo un pecorino blando curado entre 1 y 4 meses.

La consistencia de esta delicia será crujiente en la parte exterior y tiernamente firme en el interior… todo envuelto en un dorado rebozado. ¿Qué más se puede desear?


Información

  • Dificultad: baja
  • Tiempo preparación: 20 min
  • Coste: bajo
  • Dosis: para 4 personas

Ingredientes

  • Queso Primosale: 650 g
  • Harina: 150 g
  • Pan rallado: 150 g
  • Huevos: 2 mediano
  • Sal: 1 cucharadita
  • Aceite de girasol: para freír

Realización

Corta el Primosale en lonchas o en cubitos (dependiendo del corte de queso que tengas).

En un cuenco bate los huevos y en otros dos vierte respetivamente la harina y el pan rallado.

Esparce un poquito de sal fina sobre el queso y pasalo, en este orden, por la harina, el huevo y el pan rallado. Trata de rebozar cada lado.Primosale frito

Fríe en aceite de girasol bien caliente hasta que esté dorado.

(Nota: sumerge pocos trozos de queso a la vez, para que la temperatura del aceite no baje repentinamente 😉 )

Escurre sobre papel de cocina para absorbir el exceso de aceite.

¡Listo!

¡BUEN PROVECHO!


Sugerencias

Se aconseja consumir recién frito.

Si deseas dar un toque aromático al rebozado, prueba a incluir en el pan rallado un poco de orégano fresco o romero picado.

Rosas de Carnaval con confituras

Presentación

El Carnaval está cada vez más cerca y los postres clásicos nunca pasan de moda.

Todavía, la innovación también hay que llevarla a la cocina y en este caso respeto a la forma: unas preciosas rosas de masa para intrigoni/orejas de Carnaval.

Se prepara más rápidamente y sencillamente de lo que parece y la presentación es muy original 😉

La masa es increíble: no se queda completamente seca, sino que crujiente por fuera y ligeramente suave por dentro… lo que, junto a la confitura, la hace muy muy golosa!


Información

  • Dificultad: normal
  • Tiempo preparación: 30 min
  • Coste: bajo
  • Dosis: para 4 personas

Ingredientes

  • Aceite de girasol: para freír
  • Azúcar glás: para decorar
  • Confituras: al gusto (mango, fresa, cerezas)

PARA LA MASA:

  • Huevos: 3 medianos
  • Azúcar: 3 cucharadas
  • Licor aromático: 3 cucharadas (anís, ron, whisky o también vino blanco)
  • Aceite de girasol: 3 cucharadas
  • Sal: 3 pizcas
  • Harina de trigo: 420 g
  • Cáscara de 1 limón y de 1 naranja
  • Aroma: 2 ml (naranja, limón, ron) [opcional]

Realización

Lava un limón y una naranja y ralla las cáscaras por una malla fina, pero sin rallar la parte blanca y amarga por debajo de la piel.

En un bol rompe los huevos, y añade todos los ingredientes excepto por la harina.

(Truco: el licor, además de aromatizar, gracias a su contenido alcohólico permite que la masa no absorba grasa mientras se fríe 😉 )

Mezcla bien todos los ingredientes con la cuchara.rosas de carnaval 1.JPG

Incorpora poco a poco la harina (en 3 veces) y mezcla para que se incorpore cada vez que añadas más.

Amasa bien para que obtener una textura homogénea.

Coge mitad de la masa y extiéndela con un rodillo sobre la encimera bien enharinada. Esparce un poco de harina por encima de la masa también, para que no se te pegue el rodillo.

El espesor debe ser de unos 2-3 mm.

Coge dos vasos: uno con un diámetro más grande que otro (por ejemplo 3,7 cm y 3 cm).

Recorta tantos círculos de masa con el primer vaso como con el segundo.

Con un cuchillo recorta los pétalos, incidiendo sin llegar al centro (o los pétalos no se sujetarán) en todos los círculos [como en la foto de arriba].

Coge el círculo más pequeño y pégalo por encima del más grande, presionando suficientemente en el centro de la flor con la yema de un dedo. Repite con todos los círculos.

Calienta unos 3 cm de aceite de girasol en una sartén. Fríe las rosas, dando la vuelta para que se doren por ambos lados. Notarás como la masa se hincha.

rosas de carnaval con confituras

Escurre sobre una hoja de papel de cocina y deja enfriar.

Esparce un poco de azúcar glás por encima y coloca un poco de confitura en el centro de cada rosa.

¡Listas!

¡BUEN PROVECHO!


Sugerencias

Si cubres las rosas con una campana de cristal o con una bolsita de plástico, aguantan perfectamente unos 3-4 días y se quedan crujientes fuera y levemente suaves en el centro 😉

Descubre también los intigoni emiliani: ¡se preparan con los mismos ingredientes!

Tortitas de berenjenas envueltas en crujientes patatas

Presentación

Si buscas una forma de preparar las berenjenas que sorprenda a tu familia, comensales o, incluso a ti mism@, ¡has encontrado la receta ideal!

Estas tortitas de berenjenas son sorprendentes: están envueltas por una crujiente y deliciosa capa de patatas que te hará olvidar de cualquier otra guarnición para tus platos de carne o pescado.

Y ya verás que los niños no te pedirán otra cosa desde ahora en adelante 😉


Información

  • Dificultad: baja
  • Tiempo preparación: 30 min
  • Coste: bajo
  • Dosis: para 4 personas

Ingredientes

  • Berenjenas: 2
  • Patatas: 3 medianas
  • Huevos: 3
  • Harina: para rebozar
  • Aceite de girasol: para freír
  • Sal: al gusto
  • Pimienta: al gusto

Realización

Limpia y pela las berenjenas. Córtalas en rodajas de 5-8 mm aproximadamente de espesor.

Esparce un poco de sal y deja reposar durante unos 5 minutos. Pasado ese tiempo elimina el líquido que ha salido de las berenjenas con una servilleta.

Pasa las rodajas en harina por ambos lados.

Pela las patatas y rállalas por la malla gruesa de un rallador.

En un bol rompe los huevos y bátelos, añadiendo sal y pimienta.

Pasa las rodajas de berenjena en el huevo batido.

A continuación, cubre las rodajas de berenjena por ambos lados con las patatas ralladas.

Fríe en un poco de aceite de girasol caliente hasta que las tortitas estén doradas por ambos lados.

Escurre sobre papel absorbente.

Tortitas de berenjenas envueltas en crujientes patatas
Tortitas de berenjenas envueltas en crujientes patatas

¡Listas!

¡BUEN PROVECHO!


Sugerencias

Puedes sazonar las patatas con las especias que prefieras.

Sirve con asados, chuletas, filetes, pescado frito, etc… o como plato principal, acompañadas por una salsa de setas o a base de los jugos de la carne 😉

Rösti de patatas

Presentación

Todo cocinero sabe que con las patatas se pueden hacer millones de recetas exquisitas.

Hoy podéis probar el Rösti, la típica tortilla de patatas suiza, precisamente del cantón de Berna, pero con nuestro toque personal.

Es perfecta para el desayuno, con queso fresco o como guarnición para platos de carne.


Información

  • Dificultad: baja
  • Tiempo preparación: 30 min
  • Coste: bajo
  • Dosis: para 4 personas

Ingredientes

  • Patatas: 6 medianas
  • Harina: 3-5 cucharadas
  • Huevo: 1 mediano
  • Sal: al gusto
  • Pimienta: al gusto
  • Aceite de girasol: para freír

Realización

Pela las patatas y rállalas con la malla gruesa del rallador o con una mandolina.

Rompe un huevo en un bol y bátelo.

Añade al bol las patatas ralladas, sazona con sal y pimienta y mezcla.

Añade unas cucharadas de harina para que las tortitas sean más compactas y fáciles de freír: la cantidad depende del contenido de agua de las patatas empleadas.

rosti de patatas

En una sartén añade un poco de aceite y deja que se caliente. Cuando esté bien caliente habrá llegado el momento de freír los rösti.

Con una cuchara coge un poco de patatas y colócalas sobre la olla, aplastándolas ligeramente.

Da la vuelta cuando estén doradas para que se frían también por el otro lado.

Retira cada tortita de la sartén y deja escurrir sobre una hoja de papel de cocina.

¡Listo!

¡BUEN PROVECHO!


Sugerencias

Puedes servir los rösti en muchísimas maneras: como guarnición de tus estofados, gulash, pollo asado, con queso fresco, con queso quark y cebollino, con creme fraîche y salmón, etc.

Si quieres que tu el rösti sea tu plato principal, puedes añadir 150g de gruyere.