Presentación
Después de probar este plato, las pechugas de pollo rebozadas dejarán de ser el clásico, pero aburrido, segundo de carne blanca, para convertirse en algo seductor para los ojos y el paladar.
Añadir la triunfal combinación siciliana de berenjenas, tomates y Ricotta salada curada (o Pecorino) a las pechugas va a revalorizar este segundo y esta receta quedarse en tus menús para las quedadas entre amigos, las cenas en familia o las comidas de los peques.
Al final de la receta encuentras algunas sugerencias para una versión light que corta en calorías, pero no en sabor 😉
Información
- Dificultad: baja
- Tiempo preparación: 30 min
- Coste: normal
- Dosis: para 4 personas
Ingredientes
- Pechuga de pollo: 600 g (en lonchas)
- Tomates pelados enteros: 400 g
- Berenjena: 1
- Pecorino: 50 g
- Ricotta salada curada: para decorar (sustituible por Pecorino)
- Cebolla: ½
- Huevos: 2 medianos
- Albahaca fresca: al gusto
- Orégano: al gusto
- Sal: al gusto
- Pan rallado: para rebozar
- Pimienta: al gusto
- Aceite de girasol: para freír
Realización
Empecemos preparando la salsa.
Limpia la cebolla, pícala finamente y deja que se dore en aceite de oliva virgen extra. Añáde los tomates pelados picados en trozos, el orégano, un poco de albahaca y sal y pimienta al gusto. Deja que la salsa se cocine hasta que esté espesa.
Mientras tanto, elimina las extremidades de la berenjena y corta primero unas lonchas finas (que utilizaremos para decorar) y pica el resto en cubitos. Fríe tanto las lonchas como los cubitos en aceite de girasol hasta que estén doradas y deja escurrir sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Incorpora los cubitos a la salsa de tomate y aparta las lonchas para después.
Ahora vamos a preparar el pollo.

Ralla el Pecorino, anádele pan rallado y mezcla. Sazona el pollo con sal y pimienta, pásalo por los huevos batidos y después y rebózalo en el pan rallado con queso.
Fríe las pechugas de pollo en aceite caliente hasta que estén doradas y deja que el papel absorbente retire el exceso de aceite.
Ahora ya podemos emplatar: coloca las pechugas de pollo y encima la salsa caliente, añade las lonchas de berenjena fritas para decorar junto a un poco de Ricotta salada rallada y unas hojas de albahaca fresca.
¡Listas!
¡BUEN PROVECHO!
Sugerencias
Prepara el plato poco antes de servirlo, para que esté caliente.
Para una versión light:
- Puedes preparar las pechugas de pollo al horno si lo prefieres: una vez rebozadas, coloca las pechugas encima de una bandeja cubierta con papel para horno y esparce un poco de aceite encima antes de hornear;
- Evita freír los cubitos de berenjena y deja que se cocinen en la sartén donde preparas la salsa: añádelos cuando la cebolla esté dorada y antes de incorporar el tomate.
Si es la primera vez que te asomas a la salsa a la norma, prueba el primer plato original del que deriva esta receta: te va a encantar 😉